Si manejas un vehículo en la Ciudad de México, ya sea como propietario particular, u operador para una empresa, seguramente has escuchado hablar sobre las multas por placas no visibles. Este tipo de sanción es más común de lo que parece, y muchas veces no somos conscientes de los pequeños detalles que pueden derivar en una infracción. Tener placas en perfecto estado no es solo una cuestión de estética, sino de cumplir con la normativa vial CDMX para evitar problemas legales, retrasos operativos y gastos innecesarios.
OJO: ¿Qué se considera una “placa no visible”?
Cuando hablamos de “placas no visibles”, las autoridades se refieren a cualquier situación que impida leer correctamente los datos de la placa de un vehículo. Esto incluye:
- Suciedad acumulada: La falta de limpieza puede cubrir los números, letras o el holograma de la placa.
- Deterioro físico: Golpes, desgaste o daños que afecten la legibilidad de los caracteres.
- Ubicación incorrecta: Placas mal colocadas, fuera del área destinada o cubiertas por objetos, como portaequipajes, bicicletas o carga.
- Placas falsificadas: Aunque esto ya constituye un delito, a veces los conductores ni siquiera saben que están usando una placa apócrifa.
Uso inadecuado de portaplacas
La normativa no deja margen para excusas. Incluso si la falta es accidental, las autoridades tienen el derecho de emitir multas.
Toma nota al respecto: ¿Cuánto cuesta una multa por placas no visibles en la CDMX?
El incumplimiento de estos lineamientos te puede hacer acreedor a una multa entre 20 y 30 veces la Unidad de Medida y Actualización vigente (UMA), equivalente 2,886.60 pesos, cálculo a marzo de 2025.
Aunque puede parecer una cifra manejable, para empresas que manejan flotillas de varios vehículos, estas multas pueden acumularse rápidamente y representar un gasto operativo considerable.
¿Qué tan comunes son estas multas?
Según datos de la Secretaría de Movilidad de la CDMX (SEMOVI), el 15% de las multas emitidas en 2024 estuvieron relacionadas con irregularidades en las placas de los vehículos, lo que incluye placas ilegibles, mal colocadas o completamente ausentes. Esto equivale a miles de infracciones anuales.
Además, un informe de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) indicó que más del 40% de las flotillas comerciales en México no realizan chequeos regulares en sus vehículos, lo que aumenta la probabilidad de recibir sanciones.
Impacto para empresarios y flotillas:
Para las empresas, las multas no son el único problema. Los efectos de estas infracciones pueden ser más amplios:
- Retención del vehículo: En algunos casos, las autoridades pueden detener tu auto o camión hasta que se resuelva la infracción. Esto provoca retrasos y pérdidas en la operación.
- Costos adicionales: Además de la multa, reparar o reemplazar placas dañadas puede implicar gastos extra.
- Pérdida de reputación: Imagina que un cliente o socio ve uno de tus vehículos detenido por una revisión de tránsito. Esto puede afectar la imagen de tu empresa.¡Que no te pase!
Es por eso que para los administradores de flotillas, mantener un control estricto sobre el estado de los vehículos es esencial.
¿Cómo evitar las multas por placas no visibles?
Afortunadamente, hay formas sencillas de cumplir con la normativa y evitar estos gastos innecesarios. Aquí algunos consejos prácticos:
- Revisiones constantes: Implementa inspecciones periódicas para revisar que las placas estén limpias, sin daños y correctamente ubicadas.
- Capacitación al personal: Si operas flotillas, capacita a los conductores para identificar cualquier anomalía en las placas.
- Uso de tecnología: Algunas empresas utilizan herramientas de telemetría o cámaras que monitorean la condición de los vehículos en tiempo real.
- Limpieza regular: Asegúrate de que las placas sean visibles en todo momento, especialmente después de lluvias o recorridos en caminos rurales.
¿Y si necesitas reemplazar las placas?
Si las placas de tu vehículo están dañadas o ilegibles, lo ideal es solicitar su reemplazo lo antes posible. En la CDMX, puedes realizar este trámite en los módulos de control vehicular y tiene un costo aproximado de $1,200 pesos. Recuerda llevar la documentación necesaria, como tu identificación oficial, tarjeta de circulación y comprobante de pago de derechos.
Mantener las placas de tus vehículos en buen estado no es solo una cuestión de cumplimiento, sino una inversión en la eficiencia y reputación de tu negocio o en tu tranquilidad como conductor particular. Las multas por placas no visibles en la Ciudad de México pueden acumularse rápidamente, afectando no solo tus finanzas, sino también la operación y la imagen de tu empresa.
Recuerda que la prevención es la mejor estrategia para evitar multas y potenciar tus operaciones en la CDMX. ¡Toma el control hoy y asegúrate de un mañana más eficiente!
